VIAJE DE ESTUDIOS A ITALIA

 NUESTRA EXPERIENCIA EN ITALIA

    Este año, los alumnos de 3º y 4º de ESO hemos ido de viaje de estudios a Italia y queremos compartir con el resto de compañeros del IES Emilio Manzano cómo ha sido nuestro viaje. A continuación, contamos nuestra experiencia:

MI EXPERIENCIA EN ITALIA

    El pasado 29 de Marzo mi clase y yo comenzamos el mejor recuerdo que probablemente vayamos a tener de todos juntos.

    Nos montamos  en el autobús a las 7 de la mañana y tuvimos 6 horas de viaje que se hicieron pesadas, pero a la vez no; porque nosotros hicimos que se hiciera más ameno. Una vez que pasamos el control del covid-19 y todos dimos negativo, por fin nos montamos en el barco. Ese día estuvimos viendo el barco aunque estoy segura de que no lo hemos visto entero porque cada día nos encontrábamos una zona nueva. Nos tiramos un día entero en alta mar y lo pasamos genial.

     La primera excursión fue Palermo, a mí personalmente no me gustó mucho porque es una ciudad muy sucia, con un montón de bolsas de basura abiertas por las calles y eso no es muy agradable de ver. Los monumentos tampoco me llamaron mucho la atención, pero bueno no estuvo mal del todo.

    La segunda excursión fue a Roma y la verdad que me encantó; bueno, no sé si me gustó más la ciudad o un militar que vimos. En fin, bromas aparte: en Roma pasamos el día y la verdad que es preciosa, quiero volver y verlo todo más tranquilamente.

     La siguiente excursión fue Génova, también me gustó, pero no tanto como Roma. Y ya, la penúltima excursión fue Marsella, donde yo ya había estado dos veces, pero ha cambiado mucho y eso me impresionó porque era muy diferente a lo que yo ya había visitado con mis padres.

     Por último, ya en España la última excursión fue en Barcelona, no era la primera vez que iba pero disfruté mucho porque es una ciudad que ofrece muchas posibilidades.

     Dejando a un lado las excursiones, lo mejor del viaje ha sido la estancia en el barco, las fiestas, los momentos en los que medio barco se venía a mi camarote (y eso que era chico), las llamadas a Fernando y a Javi a las 5 de la mañana para decirles que se me había roto el cabecero y que subieran a arreglármelo (ellos subieron aún sabiendo que no había cabeceros) y muchas cosas más que si las cuento todas podría tirarme la vida, en resumen, ha sido un viaje que recordaré toda la vida. 

      

 
      ANDREA BOSQUET SAMPEDRO, 4º DE ESO.



Crucero por Italia 

    Era un extraño martes 29 de Marzo a las 7:00 de la mañana en el cual emprendimos un largo e intenso viaje de seis horas hasta Valencia.

    Al llegar a Valencia, nos dirigimos hacia el puerto, en el cual estuvimos bastante tiempo embarcando: metiendo las maletas, registrándonos, haciéndonos las pruebas del COVID-19… Al finalizar todo nos dirigimos hacia nuestro barco para establecernos y acomodarnos.

    Tras dos días viajando en aguas internacionales llegamos el 31 a Palermo. Estaba en muy malas condiciones medioambientales, el tiempo tampoco era muy acogedor ya que no paraba de llover y en mi opinión fue la peor ciudad que visitamos, sin duda no repetiría.

    El día 1 visitamos ansiosamente Roma, una de las mejores ciudades de Italia, sin duda. Era preciosa: tanto sus monumentos como ella en sí, las personas allí eran muy diferentes, pero peculiares, con una sonrisa de oreja a oreja siempre en sus caras. Los restaurantes, y no menos importante las heladerías, eran extraordinarias. Y, por supuesto, el guía que nos toco fue un encanto, podría decir que de los mejores guías que he conocido.

    El día 2 tuvimos la suerte de conocer Savona, muy bonita. Fue una sensación muy extraña porque era muy tranquila y por sus calles te daban ganas de inspeccionar más sobre ella. Algo muy curioso que tuvimos la suerte de poder degustar fue la Focaccia de diferentes sabores. ¡Fue increíble!

    El penúltimo día visitamos Marsella, muy pero que muy bella. Tenía unos monumentos espectaculares y los jabones de allí fueron de lo mejor. Olían súper bien.

    Por último, estuvimos en Barcelona aunque no tuvimos suficiente tiempo, pero de lo poco que pudimos ver fue maravilloso.

    Para finalizar esta maravillosa, única e inolvidable experiencia regresamos a Valencia donde empleamos otras 6 extensas horas en autobús para llegar hasta Laujar.

Hecho por: Alba Reina Ruiz, de 4º de ESO


VIAJE DE ESTUDIOS  CONTADO POR CIRO

    Mi viaje de estudios comenzó creo que cuando nos anunciaron que íbamos a ir en segundo de la eso (año en el que empezamos a vender para ahorrar dinero). En un principio nosotros íbamos a ir en tercero de la ESO con la promoción que se fue el año pasado del centro, pero desgraciadamente con la pandemia no pudimos ir. Yo recuerdo que en tercero estuve muy asustado porque no se sabía si podríamos ir al final, pero a principios de cuarto nos dijeron que sí.

    Este año comenzamos vendiendo mantecados, colonias, sudaderas… Todo lo que se suele vender para costear el crucero que no era precisamente barato. Recuerdo los meses de antes viendo vídeos del barco y todos súper ilusionados. También recuerdo justo el martes de dos semanas antes que Patricio dijo “dos semanitas y crucerito”. En fin, esas dos semanas se hicieron intensas, sobre todo el domingo de antes que estaba asustado por si daba positivo en el test de antígenos.

    Al final, el martes 29 de marzo llegamos todos al instituto sobre las 6:50 y hacia las 7:20 todos estábamos listos para partir hacia Valencia. El viaje se me hizo pesado, la verdad. Llegamos al puerto con mucha prisa porque llegábamos tarde e hicimos el check-in extremadamente rápido (yo fui el primero de todos, incluso antes que los maestros). Después de una larga espera hacia las 16:20 embarcamos en el crucero. Recuerdo  que estábamos hambrientos todos porque la mayoría llevaba sin comer desde el desayuno en nuestras casas, y quedaban sobras de churros en el buffet, y Pablo de 3º se echó todos los churros que quedaban.

    La primera noche estábamos todos reventados. El segundo día en el barco estábamos tranquilos y por la noche tuvimos fiesta. El tercer día hicimos una visita a la ciudad de Palermo que era bonita, pero estaba mal cuidado por los italianos (sobre todo infraestructuras y vías públicas) y por la noche fiesta de nuevo. El cuarto día, la visita a Roma, una ciudad increíble (Ana tienes que ir) y diría que mi favorita; por la noche fue la de disfraces y fue una completa pasada, por la fiesta y por todo, la verdad: mi noche favorita. El quinto día la visita a Génova, muy bonita también. El sexto día Marsella que también me impresionó, pero sobre todo porque íbamos diciendo “Ici c’est París” (lema de PSG) al equipo de Marsella porque la afición se lleva mal mutuamente. El séptimo día vimos Barcelona, aunque fue muy rápido. Fue la última noche y aprovechamos a tope. 

    El día de Valencia ya estábamos súper tristes y deprimidos. El viaje de vuelta en autobús se me hizo rápido y estaba súper triste cuando llegué. Algunos  amigos y yo lloramos porque nuestra vida no tenía nada que ver con la que llevábamos en el barco. 

    Y ese fue mi viaje de estudios que llevaré para siempre en mi memoria y en mi corazón también, porque sin la gente con la que fui no hubiera sido lo mismo. 

Hecho por: Ciro Ortín Schmitz, 4º de ESO



VIAJE DE ESTUDIOS

 

    Este viaje comenzó una mañana del día 29 de marzo que me levanté a las seis y cuarto de la mañana para coger el autobús en el instituto y nos fuimos para Valencia a coger el barco, donde pasaríamos esta nueva experiencia. 

    Salimos tarde del instituto y llegamos los últimos al puerto. Cuando llegamos fuimos corriendo con las maletas y yo llevaba dos e iba nerviosa porque una se me caía todo el rato. Una vez dentro nos cogieron los datos y nos hicieron la prueba del covid y tuvimos que esperar allí un rato. 

    Entramos al barco para las cuatro y media de la tarde e íbamos todos muertos de hambre porque no habíamos comido nada y cuando llegamos no sabíamos situarnos porque era una zona nueva que nos teníamos que aprender para esos días. Lo primero que hicimos fue ir al camarote, donde nos dejaron las maletas y después fuimos al bufé para comer, pero estaba cerrado y nos estábamos muriendo de hambre, pero nos tuvimos que esperar hasta la cena porque no sabíamos donde estaban los restaurantes que nos pertenecían.

 A las nueve y media teníamos la cena. El restaurante estaba en la parte de atrás del barco y era una zona que se movía mucho y estábamos un poco mareados porque no estábamos acostumbrados a ese movimiento.

 Después de cenar nos fuimos a la discoteca y bebíamos piña colada porque no nos daban alcohol. Y cuando cerraba la discoteca nos subíamos a la planta diecisiete porque queríamos seguir la fiesta. 

    El día siguiente lo pasamos entero navegando y nos intentamos hacer un poco con el barco. El tercer visitamos Palermo que es una ciudad un poco fea y nos llovió, pero estuvo bien la visita aunque acabamos cansados de andar. El cuarto día visitamos Roma: una ciudad bastante bonita,  la verdad fue una de la que más me gustó aunque íbamos muertos porque "hicimos empalme" (estuvimos casi toda la noche hablando con una amiga que nos hicimos). El quinto día estuvimos en Génova, otra ciudad de Italia también muy bonita y la excursión la hicimos casi todo el rato en autobús. El sexto día nos despertamos en Francia, concretamente en Marsella, y vimos su catedral que era preciosa. La última ciudad que visitamos fue Barcelona, que estuvo muy bien también porque vimos la Sagrada Familia un monumento raro, pero interesante y nos fuimos al barco. 

    Al fin, el último día nos despertamos otra vez en Valencia donde cogimos el barco y volvimos a coger el autobús de vuelta a casa y fue un camino cansado donde todos íbamos durmiendo.

Esther Martín Gallardo, 4º de ESO


    El primer día llegamos al puerto de Valencia. Durante el día y la noche estuvimos navegando mientras hacíamos las distintas actividades disponibles en el crucero y al día siguiente llegamos a nuestro primer destino, que fue la ciudad italiana llamada Palermo. Por la noche, se hizo una fiesta: noche de gala; tenía que ir todo el mundo vestido de forma muy elegante. 

    A la mañana siguiente llegamos a Roma; mi cuidad favorita por su belleza y su cultura. Estuvimos visitando la Fontana di Trevi, el Coliseo Romano y la Ciudad del Vaticano. Después llegamos al barco para ir a nuestro siguiente destino, que fue la cuidad de Génova

    Génova era una cuidad más pequeña y acogedora, pero fue una de mis favoritas junto a Roma y Marsella. Esta última fue nuestra siguiente visita, tras la que iniciamos rumbo a casa para visitar nuestra última cuidad que ya pertenecía a la península: Barcelona.

    Barcelona es una ciudad que me impresionó, aunque faltaron muchas cosas por visitar debido al poco tiempo del que disponíamos. 

    Y esta es mi redacción de nuestro viaje de estudios. Mi opinión personal acerca de él es que fue una experiencia que no se me va a olvidar nunca porque estuvo chulísima y es la primera vez que hacía algo así.


                                               Hecho por: Fernando González García, 4º ESO



MI VIAJE ITALIANO 

    Mi viaje comienza el 28 de marzo de 2022. Estábamos todos en la parada emocionados por el viaje. El primer día pasaron pocas cosas: solo fue el viaje de ida, la subida al barco y comer unos churros, aunque por la noche fuimos a la discoteca.

    El segundo día era libre, es decir, nos dejaban ir por donde quisiéramos en el barco durante todo el día. Por la mañana nos tiramos por los toboganes de agua que había en el barco y por la tarde estuvimos viendo a fondo el barco. Por la noche disfrutamos de la discoteca. 

    El tercer día nos tocaba empezar a viajar por diferentes ciudades, la primera fue Palermo, en mi opinión la peor de todas con diferencia porque estaba todo muy sucio y fuimos a pie sin descansar. Por la tarde estuvimos en el barco jugando a voleibol. Por la noche discoteca (qué novedad). El cuarto día nos tocó para mi la mejor excursión de todas: Roma fue la mejor ciudad que visitamos porque estaba muy chula, comimos allí, fuimos al Vaticano… y por la tarde estuvimos en el barco bañándonos en piscinas y por la noche estuvimos hasta muy tarde porque mi amigo Ciro se había perdido y resulta que solo se quedó dormido en un sofá del barco (quería matarlo). 

    El quinto día fuimos a Civitavecchia, fue la excursión más sencilla de todas porque todo estuvo bien, pero era un poco aburrido ir andando de un lado a otro, por la tarde estuvimos en el barco relajados y descansando y por la noche estuvimos en la discoteca. 

    El sexto día fuimos a Marsella, en esta excursión solo vimos un monumento a pie lo demás lo vimos todo en el autobús, paramos a comer y poco más, por la tarde estuvimos en en las piscinas con un frío parecido al Polo Norte y por la noche estuve en la habitación porque estaba muy cansado. 

    El séptimo día fuimos a Barcelona donde vimos la Sagrada Familia, vi a mi tía (literalmente) y fuimos a donde se celebraron los juegos del 92. Había muchas tiendas del Barcelona, pero en ellas se nota que el Real Madrid es el más grande ya que había muchos productos del Madrid. 

    Por la tarde estuvimos en el camarote y por la noche estuvimos en una fiesta donde la música se escuchaba por unos cascos. El octavo y último día fue el de regreso donde paramos a comer y llegamos sobre las 7 30. 

    En mi opinión este viaje ha sido el mejor de toda mi vida porque ha estado muy bien todo y lo he podido disfrutar con mis amigos, aunque siendo sincero al sexto día me quería ir porque yo sin fútbol no soy persona.

Germán Rodríguez González, 4º de ESO



MI VIAJE DE ESTUDIOS

    Era un martes 29 de abril diferente, ya que ese mismo día tendría inicio mi viaje de estudios de 4º ESO. Eran las 7 de la mañana y estaba junto a mis compañeros a punto de salir en autobús hacia el puerto, y la emoción y las sensaciones de ilusión eran intensas.

    Durante el camino me sentía muy emocionado y al llegar al puerto y ver aquel inmenso barco, no me lo podía creer. Al subirme al barco no me podía creer que ya estuviera dentro y el resto de ese día estuve con mis amigos explorando el barco. 

    A la mañana siguiente ya tenía asimilado que estaba en mitad del mar en un crucero y no me lo pensé más y fui con mis amigos a pasarlo en grande, pero a la noche nos dimos cuenta del problema que tenía el barco, se movía mucho y hasta mareaba un poco, pero eso no iba a frenar nuestras ganas de fiesta. 

    En los siguientes días tuvimos que madrugar para realizar unas excursiones por diferentes ciudades de Italia y Francia, algunas de ellas no me gustaron y otras me encantaron, sobre todo Roma. El resto de las tardes y de las noches de esos días las pasábamos en el barco y fue una experiencia en la que me sentía en el paraíso: la mejor compañía, todo tipo de lujos, un sin fin de cosas que hacer... 

    El tiempo no nos acompañó mucho hasta llegar a Barcelona donde intenté aprovechar al máximo todo lo que tenía el barco ya que nos quedaba poco viaje. El día del desembarque fue una despedida triste, hasta hizo un día nublado. Ninguno de nosotros, incluso los profesores, no se querían ir de aquel barco. En esa mañana de desembarco me sentí muy apagado porque me iba del paraíso y todo parecía volver a la normalidad, pero aunque volviese apagado también estaba alegre porque había vivido un sueño que siempre recodaré con una sonrisa.

    Estas palabras han sido una pequeña opinión y descripción de todo lo que sentí en el viaje de estudios. Sinceramente, recomiendo la experiencia de realizar un crucero ya que desconectas muchísimo de la rutina y conectas con la gente que realizas el crucero y aprendes muchas cosas si visitas sitios interesantes.


REALIZADO POR GABRIEL LÓPEZ GONZÁLEZ


Viaje Italia

    El pasado 29 de marzo comenzamos nuestro viaje por Italia, una gran experiencia que desafortunadamente duró una semana.

    El primer día fue entero viajando, tanto desde Laujar hasta Valencia o a través del mar Mediterráneo para llegar a nuestro primer destino: Palermo. Para nada fue aburrido, fue perfecto para conocer todos los rincones de nuestro barco y disfrutar de todas las actividades que se realizaban en este.

    Una vez en Palermo, estuvimos toda la mañana visitándola. De entre los lugares que visitamos destacaría la catedral y el monumento a Felipe V. También aprovechamos para degustar el cannolo siciliano, un postre típico de Sicilia. Una vez terminada la excursión, volvimos al barco y partimos hacia Civitavecchia.

    Al siguiente día, cogimos un autobús desde Civitavecchia hasta Roma para realizar nuestra segunda y más larga excursión. Cuando llegamos a Roma realizamos un pequeño tour en autobús en el que vimos monumentos como el Coliseo. Este terminó en la Plaza de España. Una vez allí, anduvimos hasta la Fontana di Trevi. Por la tarde visitamos la Ciudad del Vaticano.

    El tercer día visitamos Génova, donde destaco la Piazza de Ferrari. Allí, probamos la focaccia genovesa. En el cuarto día viajamos hasta Marsella. Allí hicimos un tour en autobús donde paramos un par de veces para ver los monumentos.

    La última excursión fue a Barcelona, donde realizamos un tour en autobús con diferentes paradas. De allí destaco Montjuic, la Sagrada Familia y el barrio gótico. Nuestro viaje terminó en Valencia, desde donde volvimos en autobús hasta el punto de salida: Laujar.


Hecho por: Patricio Sampedro Baños, 4º de ESO


VIAJE DE ESTUDIOS 2022 

    El viaje de estudios 2022 del IES Emilio Manzano, al cual asistieron los alumnos de los cursos 3º y 4º ESO, va ha ser nuestro tema de hoy.

     En primer lugar, casi perdemos el crucero por culpa de un problema de gestión por parte de la empresa de autobuses, aunque conseguimos llegar a tiempo todos estábamos nerviosos, ya no solo por el viaje sino por el hecho de que después de tanto esfuerzo por parte de todos pudiésemos llegar a perder esta oportunidad. Al final llegamos todos y pudimos embarcar y empezar esta aventura.

    Durante el resto del primer día (29 de marzo) nos dedicamos a acomodarnos en nuestras habitaciones, y posteriormente cuando ya había oscurecido decidimos salir un poco para investigar todas las instalaciones y disfrutar de todas ellas, aunque al día siguiente tendríamos muchísimo más tiempo en el que dedicarnos a probarlo todo y a familiarizarnos con ello.

     Al segundo día (30 de marzo) nos despertamos muy temprano y quedamos con nuestros amigos para ir a desayunar y pasar un rato en la habitación hablando sobre cómo había ido la adaptación, después de ello fuimos a dar un paseo y ya nos quedamos en el buffet para ir a comer, ya que el día anterior no habíamos comido nada, tan solo cenamos. Allí en el buffet decidimos entregarle a Cintia su regalo y cantarle el cumpleaños feliz, así que hicimos un “complot” para sentarnos todos juntos y para que mientras ella iba a por la comida nosotros pudiésemos preparar la sorpresa. Cuando ya la vimos regresar con el plato de comida al lugar donde estábamos, comenzamos a cantar y se le saltaron las lágrimas de la emoción al vernos a todos juntos cantando y sosteniendo su regalo. Después de comer decidimos ir a cambiarnos y pasar toda la tarde juntos en la piscina.

    Por la noche fue la cena de gala, la primera cena temática, en uno de los muchos restaurantes del crucero y cuando esta acabó todos nos dirigimos a la discoteca donde estuvimos bailando entre todos, tanto alumnos como profesores hasta las 2 de la mañana, ya que al día siguiente nos esperaba un día largo en Palermo y había que descansar.

    El tercer día (31 de marzo) nos tuvimos que despertar a las 7 para estar puntuales a la excursión por Palermo que iniciamos a las 8. La excursión estuvo bastante bien, vimos un par de iglesias con unos decorados magníficos y un par de teatros y esculturas con unas decoraciones increíbles, aunque también hay que añadir que el mantenimiento de las vías públicas era mejorable.

    El cuarto día (1 de abril) fuimos a la que fue la excursión más larga de todo el viaje, la excursión a Roma, a pesar de ser la más larga no pudimos ver todos los rincones de esa maravillosa ciudad pero sí pudimos ver los que son los más importantes.

    La Fontana di Trevi era preciosa, al igual que el Vaticano, donde nos encontramos a un señor super amable que bailaba en el centro de la Basílica de San Pedro y que supo donde estaba Almería gracias a su equipo de fútbol y sus jugadores, y al igual que el coliseo, el que vimos en una mini excursión con nuestro tutor en el tiempo libre que nos dejaron.

     El quinto día (2 de abril) estuvimos en Génova, aunque desembarcamos en Savona. Génova era súper bonita y tenía unas vistas espectaculares al mar, sin duda fue el segundo sitio que más me gustó después de Roma, pero Savona no se quedaba atrás, nos llevaron a una playa de rocas que transmitía toda la tranquilidad del mundo.

    El sexto día (3 de abril) dimos un paseo por Marsella, pero fue el que menos me gustó, no porque Marsella no fuese bonita sino porque la excursión no estaba bien organizada por parte de la empresa del crucero, pienso que podríamos haber hecho más paradas para bajarnos del autobús y no recorrer toda la ciudad dentro de él.

    El séptimo y penúltimo día (4 de abril) decidimos ir a ver Barcelona, que también tiene muchas cosas que visitar, la excursión estuvo bien pero fuimos demasiado rápido y aún así nos quedaron muchas cosas por ver, además de que la “amabilidad” de la guía no acompañaba. Pienso que hubiese sido mejor centrarse en lo más importante y verlo detenidamente en vez de ir súper rápido e intentar abarcarlo todo.

    El octavo y, ya sí, el último día (5 de abril) emprendimos nuestro viaje de vuelta al IES, contando y riéndonos todas las anécdotas y recuerdos que se quedarían en nuestra memoria para siempre como el mejor viaje de nuestra vida, porque aunque tuviese sus defectillos, sí fue el viaje de nuestra vida.





Realizado por: Irene Pérez Arévalo, de 4º de ESO



VIAJE DE ESTUDIOS 2022

 

Día 1

    A las 7:00 nos montamos en los autobuses y después de 6 horas escuchando reggaetón a todo volumen y de una parada para tomarnos algo en una gasolinera, por fin llegamos a las cuatro y algo al puerto medio muertos y sin ganas de vivir, como se nos retrasó el autobús casi zarpa el barco sin nosotros y además nos quedamos sin comer hasta que cenamos a las 9 y media. Llegamos a las habitaciones y al entrar todos nos decepcionamos ya que apenas había espacio para vivir 3 o 4 personas. Después de cenar fuimos a dar una vuelta por el barco y nadie sabe como terminamos 8 personas durmiendo juntas en la misma habitación a las 5 de la mañana.

 

Día 2

    Este era nuestro día libre y después de casi no comer ni dormir el día anterior fuimos los primeros en levantarnos para ir a desayunar y después de eso estuvimos explorando el barco y nos fuimos a jugar al voleibol con los guiris del barco hasta las nueve y cuarto que fuimos a la cena de gala.

 

Día 3

    Por la mañana estuvimos de visita en Palermo, que nos pareció la peor de las excursiones porque aunque la ciudad era bonita estaba llena de basura y era muy desagradable andar por allí. Estuvimos visitando los lugares más destacables de la ciudad y probamos un postre típico de Sicilia. Como ese era el primer día que tuvimos cobertura aprovechamos para llamar a nuestras familias y nos echamos a dormir para reponernos del madrugón. Por la noche nos preparamos para la noche de blanco.

 

Día 4

    Cuando nos despertamos ya estábamos en Civitavecchia y cogimos un autobús para ir hacia Roma, fue un trayecto largo pero se nos hizo ameno gracias a nuestro guía. Nos lo pasamos muy bien y vimos un montón de monumentos. Almorzamos allí y la comida (una pizza) era una maravilla comparada con lo que nos daban en el crucero. Visitamos el Vaticano y nos encontramos un nigeriano perreando en frente de la residencia del Papa. Durante el viaje de vuelta íbamos todos reventados de tanta fiesta y nos quedamos dormidos en el autobús hasta que el guía nos levantó con la música a todo volumen. Por la noche en la cena teníamos que ir vestidos con disfraces, así que estuvimos un rato descansando y después nos preparamos (ninguno íbamos disfrazados).

 

Día 5

    Nos levantamos en Savona, cogimos el autobús y fuimos de excursión por Génova, la ciudad era muy bonita y visitamos muchas cosas. Al medio día fuimos a comer a la hamburguesería del barco, después nos fuimos a la habitación de los niños el capitán del barco hizo un simulacro para los turistas que se acababan de subir al barco pero nosotros nos confundimos porque nadie sabía hablar español y pensamos que nosotros también teníamos que hacerlo.

 

Día 6

    Fuimos a Marsella, estuvimos toda la excursión en el autobús y solo pudimos ver una catedral con muy buenas vistas y el Burger King del puerto en el que comimos (Cintia provocó una pelea entre palomas).

 

Día 7

    Estuvimos por Barcelona, nuestra guía, que se pegó todo el viaje quejándose de la alcaldesa de Barcelona, únicamente nos enseñó la Sagrada Familia, un poco de la rambla y la plaza Sant Jordi. Además nos metieron por callejuelas llenas de banderas republicanas e independentistas que daban una mala impresión de la ciudad, al mediodía nos fuimos a un restaurante pijo del barco y Nayra tiró la mitad de los cubiertos. Después nos perdimos con Rafa por el barco buscando el jacuzzi y por último estuvimos haciendo las maletas porque a las 12 de la noche se las tenían que llevar los empleados del barco.

 

Día 8

    Desayunamos, estuvimos dos horas esperando a poder irnos y nos montamos en el autobús. Paramos a comer en un McDonald´s y al salir empezó a diluviar y nos empapamos todos. Después de más de seis horas de sufrimiento llegamos a Laujar y por fin pudimos irnos a dormir todo lo que no habíamos dormido en esa semana.

 


Realizado por: María Dolores Cruz Morales, Rubén García Rodríguez y Nayra Aguilera Fernández













   


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